Dr. Alex Antezana Arzabe. Traumatólogo Ortopedista, Traumatología Deportiva
Uno de los grandes problemas en el deporte es el control de las cargas y niveles de entrenamiento en la actividad deportiva. El correcto conocimiento de la carga de entrenamiento es esencial para el control de las cargas y de esta forma evitar las lesiones causadas por el ejercicio. Cuando hablamos de carga en el entrenamiento nos referimos al volumen e intensidad de ejercicio, y en muchas actividades estos parámetros son la distancia y la velocidad.
Aplicaciones del GPS en el deporte
La principal aplicación por la cual el GPS fue diseñado es la navegación, además se le atribuyó otro tipo de usos como es en el caso del deporte.
Determinar la velocidad de desplazamiento de un individuo en numerosas situaciones de la vida real es extremadamente importante para los estudios del metabolismo energético, así como del gasto energético diario. Hasta ahora, este tipo de determinaciones eran difíciles de realizar, y en caso de llevarse a cabo, se hacía con poca precisión.
La tecnología GPS aplicada al deporte permite una constante monitorización de la posición, la velocidad de desplazamiento y la altitud a la que se encuentra un deportista.
Ser capaces de registrar estas variables continuamente, al aire libre, en el propio entorno de entrenamiento y en cualquier tipo de terreno es, sin lugar a dudas, una gran ventaja.
La herramienta del GPS nos da a conocer el uso que hace el deportista de su cuerpo, nos ayuda a mejorar sus habilidades y a prevenir fatigas y lesiones. Lo más importante de los datos que nos aporta el dispositivo es el de saber cómo interpretarlos.
Este dispositivo mide múltiples parámetros. En líneas generales, la distancia recorrida por un deportista, y su intensidad.
Aplicada al entrenamiento sirve para poder cuantificar las cargas.
Para dar valor a los resultados es importante crear una base de datos en relación a las características del deportista, como el peso, talla y edad.
Se debe realizar una serie de test de campo para obtener una serie de resultados, y posteriormente analizar los mismos con el objeto de determinar el estado físico de los jugadores.
VENTAJAS Y LIMITACIONES DEL GPS
Las ventajas del GPS parecen claras: un dispositivo pequeño, ligero y autónomo que nos proporciona posición, velocidad de desplazamiento y tiempos precisos de forma continua y sin importar el tipo de terreno en que nos encontremos; los datos pueden visualizarse en tiempo real y registrarse para su posterior análisis.
La principal limitación es que las mediciones sólo pueden llevarse a cabo al aire libre, en un entorno en el que la señal satelital no se vea obstruida.
Pese a todas estas circunstancias, los receptores GPS son cada vez más sensibles y sofisticados, y proporcionan una mejor cobertura incluso en condiciones no ideales.
QUÉ PARÁMETROS MIDE EL GPS
Existen varios parámetros que mide este dispositivo, dependerá en sí del tipo de aparato y accesorios a utilizarse. Entre algunos parámetros que se pueden obtener están:
la distancia recorrida (metros recorridos), que conjugada con el tiempo permite obtener la velocidad media; las aceleraciones que realiza el deportista en el terreno de juego; la distancia a alta intensidad, aquella a la que el jugador llega por encima de su VO2 máximo (consumo máximo de oxígeno, mide la capacidad aeróbica).
Todos estos valores son de mucha importancia para el preparador físico, ya que constituyen una base importante para diseñar el trabajo específico que tendrá el deportista y llegar a un punto máximo en su rendimiento deportivo.
GPS Y MONITOR DE RITMO CARDIACO INTEGRADOS
Aunque cada vez la tecnología va desarrollando, el uso del GPS con monitor de ritmo cardiaco integrado viene tomando mucho interés en aquellas especialidades deportivas en las que tradicionalmente ha sido difícil obtener este tipo de mediciones.
Si tenemos la posibilidad de relacionar estos datos con la respuesta fisiológica del deportista, el tipo de material empleado o las condiciones meteorológicas, nuestro conocimiento de todos los factores implicados en el rendimiento serán sin duda cada día mejor.
Los estudios llevados a cabo hasta la fecha demuestran que el sistema GPS proporciona medidas lo suficientemente precisas como para poder ser empleado en la medicina deportiva, o en la evaluación del deportista sobre el terreno de entrenamiento o de competición. Combinado con otros receptores, como el pulsímetro u otros sensores biomédicos, es posible realizar un pormenorizado análisis a la respuesta fisiológica en cada momento de la actividad deportiva.
La incorporación de este tipo de dispositivo permitirá mejorar la validez de los test realizados en el campo de juego, y esto nos dotará de un mayor control sobre el esfuerzo realizado y de medidas más fiables y objetivas obtenidas hasta ahora.
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