El presidente de la Cámara de Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz), Guillermo Schrupp, sostuvo que problemas estructurales en el sistema de contrataciones del Estado (sicoes) hace que las empresas del sector pierdan interés en las licitaciones que presenta el gobierno.
"El sistema de contrataciones estatales, a través del secreto supremo 181, tiene problemas estructurales significativos, hemos venido charlando el tema con el Vicepresidente del Estado y el ministerio de Obras Públicas para mejorar el tema de contrataciones estatales, comenzando por un adecuado diseño, un adecuado precio de referencia (de las obras) y garantías más flexibles", manifestó el presidente de Cadecocruz.
El gerente general de la entidad, Javier Arze, dijo al respecto, que bajo esas reglas de juego, los constructores muestran desinterés porque no tienen la certidumbre de poder cumplir con las obras y arriesgan su patrimonio y empresa.
"En una licitación se pone de garantía el patrimonio, en muchos casos se puede perder hasta la empresa cuando son proyectos mayores a un año de duración, entonces, el empresario en este momento tiene que tomar decisiones bastante pensadas para presentarse", expresó.
Schrupp insistió en que el sector constructor requiere que se flexibilicen las garantías y contar con un régimen laboral propio "porque la construcción es diferente a lo que acontece en otros sectores de la economía".
"Necesitamos un régimen especial que tiene que ser tripartito, y necesitamos hacer mercantiles las planillas de obra para agilizar los pagos", señaló.
Agregó que ya propusieron al gobierno una ley que obligue que el 30% de cualquier licitación estatal recaiga sobre empresas bolivianas.
Licitaciones desiertas y rupturas de contratos
El gerente general de Cadecocruz manifestó que como resultado de la aplicación del sistema de contratación, las licitaciones se están declarando desiertas y muchas de las adjudicadas terminan en proceso de rescisión de contrato y cobro de boletas de garantía.
"Hablando en una forma preliminar, tenemos más o menos 60 contratos que están en la etapa de rescisión y ejecución de garantía en los últimos dos años, estos son los casos más relevantes", dijo.
Citó como ejemplo que se rescindió contrato con la empresa china CAMC por la construcción del tramo dos de la ferrovía Bulo Bulo Montero, y con la firma mexicana Tradeco por la construcción de la doble vía Montero-Yapacani.
Arze indicó que el Estado anualmente contrata empresas para ejecutar unas siete mil obras, de las cuales las empresas internacionales se adjudican licitaciones por hasta 3.800 millones de dólares, principalmente para la construcción de carreteras y obras especiales.
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